En esta ocasión iniciamos la actividad desde esta maravilla de Himno y el nunca caminarás solo se llena de vida.
Gracias a Richard Rodgers y a Oscar Hammerstein.
Siempre se ha dicho que vale más una imagen que mil palabras pero, ese proverbio chino deja de cobrar todo su sentido si las palabras proceden de ellas y ellos. Quedaría incompleto.
Estamos inmersos en el sentido de la amistad y quería verles fuera del aula, para lo cual hemos aprovechado el patio de los "peques" y el gimnasio.
Una sencilla dinámica en la que trabajamos la confianza, el descubrir que tendremos al lado a una persona que estará dispuesta a ayudarnos y a acompañarnos.
Sentir la alegría de fundirnos en un abrazo con un amigo .
La mitad de la clase llevará un antifaz que les imposibilita ver y les situaremos en la parte alta del patio, de manera que cada uno, cuando se inicie la actividad, tendrá que salir a buscar a su pareja, para lo cual, tendrán que agudizar el oído para orientarse en el espacio, ante la llamada de su respectivo.
Ni que decir tiene que cuando arranca la actividad, el griterío es ensordecedor ( al igual, en los coles hacen falta más voces, pero las de ellos, no las nuestras) y "jugando" están fomentando la importancia de aprender a escuchar y lo más importante, a discriminar.
Naturalmente que encuentran a su pareja y no tardan mucho, son una verdadera pasada, ¿limites?...
La dinámica se repite en una segunda ronda y quien antes buscaba, ahora será buscado.
Variantes, todas las que se quiera, desde hacer que el compañero a quien debes encontrar pueda desplazarse y por consiguiente, la dificultad se incrementa. Y así con otras tantas...
Terminada la primera parte de la actividad toca la parte de la evaluación de la dinámica y es aquí donde uno vuelve a aprender.
A la pregunta de qué has sentido, empezaban a analizar las diferentes superficies por las que iban pisando ya que pasaban de un suelo rígido a otro de caucho y, donde para algunos resultaba "chulo" para otros lo veían como un momento donde les restaba seguridad.
Siempre habrá un mismo motivo, o no, para el aprendizaje pero las interpretaciones son personales e intransferibles. Puede que sea uno de "los motivos" por los que uno se siente enamorado de ellos.
Otros hablaban de la sensación de andar a ciegas y además salvando un desnivel, ya que el patio presenta una buena inclinación "rampa" como le llaman ellos.
La seguridad de saber que al otro lado me están llamando, me están esperando y ayudando, que confían en mi y que lo voy a lograr...
En todas sus valoraciones voy aprendiendo y descubriendo si la dinámica resulta apropiada o no, si se pueden introducir más novedades pero sobre todo, son sus palabras las que me hacen buscar, pensar, querer, imaginar, acercarme...
Una niña dice:
-No se pero... "he visto un paraíso oscuro"
Obviamente parece, desde esa forma de pensar que tenemos los adultos, la idea de dos conceptos contrapuestos, lo absurdo de dos significados, un oxímoron como figura literaria pero claro, cuando esa expresión sale de una niña, todo lo comentado se desvanece, ver su expresión de plenitud, alegría, de relajación.
Jamás un paraíso podría llevar asociado la idea de oscuridad, es más si se le atribuye ese ambiente o color, denota un paraíso muerto, perdido, lleno de crueldad y dolor... PUES NOOOOO al igual, "los mayores" deberíamos dejar de jugar tanto a interpretar lo que dicen y hacen ellos y jugar más a ser como ellos.
Gracias un día más por dejarme ser vuestro alumno.
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