CUARTO CAPÍTULO

CUARTO CAPÍTULO

Porque sólo un Niño es capaz de hacerme ser Niño. Por un lado y por otro, leo, comparo, analizo y casi todo lo referente al Niño viene acompañado de tutoriales para mejorar o modificar conductas. No quiero entrar en este tema porque lo abordaré expresamente en algún capítulo posterior, pero... ¡¡¡uufff!!!
Una mañana, en clase, pregunté ¿qué puedo hacer para volver a ser niño? y una niña sin dudarlo me dijo:
- David, los mayores hacéis las cosas muy difíciles, nosotros en cambio, lo "único" que hacemos es entregar y poner nuestro corazón en cada cosa que hacemos, aunque no siempre resulte apropiado.
Tras esta respuesta no pude por menos que preguntarles de nuevo:
- ¿Cómo debo hacerlo?  ¿me ayudas?
Nada más realizar las preguntas, intervino un niño:
- Es muy sencillo, "sólo tienes que ser Niño". Deja a un lado los prejuicios, no intentes valorar aquello que vas a realizar antes de hacerlo porque, si aquello que vas a llevar a cabo, lo vas a ejecutar desde el corazón, no tiene sentido emitir un juicio de valor a priori. Si lo haces, estás perdiendo la espontaneidad y, ¿te confieso una cosa? es uno de nuestros grandes tesoros.
- Tienes que divertirte porque nosotros, hasta en las clases aburridas, nos divertimos, bueno no, así no es pero sí es verdad que tras ellas, nos lo pasamos genial.
Otra niña me comentaba:
- Los mayores cuando nos veis hacer cosas, pensáis y montáis unas historias y conclusiones que, nada tienen que ver con nosotros.
- Los mayores, cuando no nos veis hacer cosas, también pensáis que algo nos está sucediendo y, nada más lejos de nuestra realidad.
- ¿Por qué no os acercáis en lugar de darnos tantas lecciones?
- Cuando llevamos a cabo cosas que no son del todo buenas, nos reñís sin más, sobre todo con ese NOOOOO que, para vosotros, todo lo cubre, de esa forma, lo único que aprendemos es a no entender. Bajad a nuestro momento y confundiros con nosotros, porque así será un bello aprendizaje y además significativo. Que veamos que vuestra actitud es de cariño y no de juez.
Una Niña muy tímida me decía lo inimaginable:
- Si queréis ser niños, lo único que  se necesita es volver a sentir, dejar que tus emociones no tengan que pedirte permiso para vivir, nosotras y nosotros, lo "único" que hacemos es vivir como sentimos y sentir como vivimos, aunque, de un tiempo a esta parte, cada vez vivimos más como queréis y sentís los mayores y no como lo hacemos nosotros y, ESO NO NOS GUSTA.
- Dejad de querer solucionar todo porque así, seguiréis pensando como adultos. Buscáis siempre la razón en todo antes de hacer nada y nosotros, encontramos la razón, una vez que hemos hecho esas cosas.
- No queráis poner una respuesta a cada etapa que vivimos porque, la única respuesta que encontraréis será la pérdida de tiempo y así es como os hacéis tan mayores.
- No pongáis límites a nada de lo que os planteéis, pues esas barreras son las que os hacen perder los años que ahora le pedís a la vida.
- Una confidencia, " no les hagáis mucho caso a los mayores".
- Jamás ocultéis que algo os resulta aburrido.
Lola, gracias por ayudarnos a descubrir que para volver a ser Niño, debemos tener muy claro que, una cosa es cómo os contamos una historia los adultos y otra bien distinta, cómo le dais vida vosotras y vosotros a esa historia. Es maravilloso poder escuchar vuestras voces invitándonos a recuperar a esa Niña y Niño que todos llevamos dentro. GRACIAS.
Alguien decía:
" El mundo de los niños es tan maravilloso y lleno de magia que yo, a la vida, lo único que le pido es que, el día que tenga que marcharme, me permita irme jugando, de esa forma, tendré la certeza de que moriré siendo un Niño".