Ya quedan menos de 48 horas para que cada tribu, inicie su andadura en un mundo de fantasía e imaginación que, ¡¡¡ojalá!!! cuando cumplan años, lo recuerden y lo puedan contar con el gozo de seguir creyendo en esta Educación. Aunque el futuro, jamás podría construirse sin este presente.
Hoy, en esas listas de difusión del "odiado" guasap (como si tuviera vida en sí mismo...) para las familias de sexto, donde estamos llevando a cabo el proyecto de las tribus, Una madre me dice:
- Mi hija lleva en su tribu toda la tarde cocinando, es más lo están grabando... ( eso no es estudiar, eso es ...)
¿Puedes imaginar cómo me siento?'
Están jugando a imaginar y a crear, están rompiendo los límites que les marcamos, se atreven a hablar y a exponer en público, ya que el hecho de aventurarse a grabar, es una de las tareas más apasionantes pero a la vez más complejas. Querer creer que pueden descubrir que, al darle rienda suelta a su creatividad, es una forma maravillosa de descubrir dentro de ellas y ellos, connotaciones, especias e ingredientes, combinaciones que, seguramente, en sus vidas, le podrán venir muy bien para intentar elaborar cada día de sus vidas, esos platos de la ilusión, la entrega, la predisposición, la renuncia, la generosidad, la curiosidad, la empatía, la solidaridad, la verdad y trasparencia...
Me cuenta esa Madre que la grabación pesa mucho, aún me hace sentir más alegría.
Qué bonito es poder decir que:
-Sueño con el momento de este jueves (aunque lo de soñar, ¿cuándo no es Pascua?)
Porque lo genuino de la Educación siempre tiene su germen en ellos.
Desde aquí quiero anunciar que, todas estas tribus ya tienen su Estrella Michelín porque el mayor reconocimiento es el que cada persona debe tener para consigo misma. Además de esta, tendrán otra que, ya nos tocará llorarla, reirla y celebrarla.
Esta noche iré a dormir como un niño pequeño. Graciaaasssssss.
Y, aunque sólo hubiera una tribu, este jueves, que lo trae preparado, a buen seguro que, será alimento para el resto de tribus.
