Comenzar esta experiencia así, pudiera parecer desmedido, pero lo único desmedido es no haber pensado que, al igual, os he privado de disfrutar de este momento.
Preguntaba una maestra a una alumna:
- Quiero saber ¿qué es la vida para ti?
La niña sin dudar un instante le respondió:
- "Seño", para mi la vida lo es todo.
La réplica no se hizo esperar.
- ¿Cómo que lo es todo? Hay cosas en la vida que son imposibles o que, quizá, nunca puedas aspirar a lograr.
La niña con un temple, (celoso de adultos) le dijo:
- "Seño" deja que sean mis sueños los que me hagan vivir mis realidades, porque todos los días vengo al cole pensando que lo imposible, algún día lo podré disfrutar.
"Dejar de compartir lo que se disfruta cada día, es como querer renunciar a vivir"
Es por ello que hoy subo esta imagen a nuestro blog.
Este, este es el "ángel" que no me ha dejado dormir.
Claudia, ayer te tocó ser la maestra en nuestro proyecto de cuarto. Todo comenzó distinto, te sentaste en la mesa de la maestra e iniciaste la magia.
En un principio, no sabía qué habías traído preparado para "tu momento" pero, tras ver cómo cautivaste a tus "compis" sin decir nada... por favor, ¡¡¡enséñame!!!
Gracias porque me has hecho ver que mi sonrisa, para poder caminar, debe pedir permiso a vuestros pasos.
Gracias porque me has enseñado que la dulzura de una mirada, se convierte en el regalo más preciado que en cualquier ópera sería aplaudida por grandes momentos.
Gracias porque me has llevado a una dimensión, en la órbita de mis ojos, que desde hoy puedo presumir de no tener límites.
Gracias por fumigar de mimo a toda la clase desde lo cercano y sencillo.
Has hecho un pasa-palabra único. Desde la confección del rosco, bueno desde el nacimiento de ese pensamiento por querer hacer vivir lo que querías, por hacerlo, por soñar que lo pondrías en cada cabeza de tus "compis", por creer que al ponerles el rosco, te mirarían como la Maestra más maravillosa y que estarían deseando escuchar cuál era la pregunta que les correspondía, en base a la letra. Donde no ha existido temor y donde el ejemplo ha sido, ponerte a disposición de sus inquietudes. Por esa capacidad de establecer tantas cuestiones y dotarlas de intriga y cariño. Por ver que algunas preguntas que formulabas, no eran respondidas y tus ojos saltaban para, desde una expresión que pocas veces he presenciado
, les abrazabas con tu mirada para ayudarles. Por disfrutar de cada respuesta correcta y por ver cómo te emocionabas al escucharlas...
Y a vosotros, "clase" ¡¡¡Felicidades!!! por el ejemplo exquisito de respeto y admiración.
Claudia, si algún día, decides dedicarte a la docencia, no le pongas fecha, ya lo estás haciendo. ¡¡¡Felicidades!!!
