Ahora que todo se cuestiona sobre la dificultad que conlleva esta preciosa edad, alumnas y alumnos de sexto. Ahora que todo es querer echar balones fuera y pensar que es lo que toca, ahora que las hormonas parecen ser las culpables de todo, que la preadolescencia se convierte en juez y excusa de todo, al igual lo que pasamos por alto es escucharles más, al igual lo que pasamos por alto es el dedicarles más tiempo o en su defecto, "calidad" a esos tiempos.
Gulu- Gulu es un personaje que entra en sus clases y se convierte en un amigo y referente, en detector de posibles apatías, problemas camuflados, desidia, introversión. Gulu- Gulu lo único que quiere es conectar con ellas y ellos, que le sigan, que pasen un buen rato juntos y que además se haga un maravilloso saludo en francés (en cualquier idioma lo harían). Que la etapa en la que se encuentran, jamás deben considerarla como una carga. Nunnnncaaaaaaa. Además Gulu- Gulu les hace ver que cualquier simple motivo, es acicate para la motivación, para el entusiasmo, que eso de sentir vergüenza por parecer estar haciendo el ridículo, eso son leyendas callejeras. Y al utilizar esta expresión es por encender esa furia de acomodar el no hacer porque con ellas y ellos, es imposible.
Gulu-Gulu no es más que el dedo índice de mi mano izquierda. ¿Así cómo puede uno cuestionarse, la posibilidad de no querer pensar que cada mañana es una fiesta?
Niñas y niños de sexto, GRACIAS y continuad creciendo y aprendiendo pero desde la emoción. Recordad, todo lo que aprendáis desde la emoción, se convierten en verdaderos aprendizajes.
Así, con vosotras y vosotros, el primero que aprende, soy yo. Da igual la emoción que toque. Sois maravillosos.
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