Eso lo decía alguien que vivió para ellas y ellos.
Hago mía la reflexión y, tras el miedo a no saber conectar con ellos, a motivarles en esta dinámica, un día más me demuestran que, al igual el mejor Máster que se puede tener en este maravilloso mundo de la Educación, es creer que quienes te enseñan son ellos.
En esta ocasión se trataba de conectar a cada miembro de las tribus con lo que puede suponer, desde un lenguaje simbólico, la tribu familiar.
Confieso que, para mi, era un reto inmenso, intentar relacionar el cepillo y el recogedor con los miembros de una familia, la concepción de ambos elementos para eliminar basuras y espacios sucios y sustituirlos por el de una nueva oportunidad, por valorar las fortalezas, esa psicología positiva llevada hasta el punto de intentar transformar las miserias en ofertas de cambio. pretender eliminar del hogar en lugar de abordar. Porque en muchas ocasiones, el mayor conflicto no es tanto el que se genera o crea, sino el que se oculta o se "barre". Que la convivencia tiene su origen en el conocimiento de sus miembros y el respeto. Que la familia nace, existe y crece desde la corresponsabilidad de todos ellos.
Cuando uno ve, a primera hora a la clase de sexto con su cepillo y recogedor, en cómo cada tribu se ha organizado, no tiene más remedio que aparcar sus miedos y lanzarse a la aventura de intentar cautivarles.
Qué bonito es estar en su clase y presentar al cepillo y al recogedor como elementos vivos dentro del hogar, hacerles pensar que, si pudieran hablar, cuántas cosas nos contarían pero aún así, son elementos que cogemos a nuestro antojo o necesidad, siendo ahí cuando establecemos esa relación con los miembros de cada familia, ese riesgo en el que, en estas edades, parece que se zambullen muchos y muchas de ellos, al pensar que sus casas están a su disposición y capricho, un hotel de cinco estrellas.
Es cierto que es una etapa difícil pero no por ello, se puede justificar que sólo sea cuando interesa.
En cierto modo, la Educación familiar como la Educación reglada tiene mucho que cambiar porque, si queremos que nuestros niños empiecen a interiorizar deberes, al igual, antes de nada deberíamos ofrecerles sus derechos.
Una vez en el patio, un miembro de la tribu debe taparse los ojos, bien quien porta el cepillo o quien lleve el recogedor. A la señal, todas las tribus saldrán a recoger cajas, de una en una y llevarlas a su punto de salida. todas conviviendo en el mismo espacio. Cajas que llevarán dentro emoticonos sobre emociones que, una vez en clase, analizaremos.
Más de 100 cajas y...
...ninguna tribu se cruzó de brazos. Era verles comunicarse, coordinarse, saber que en el intentar una y otra vez, reside el verdadero aprendizaje.
Incluso tribus compartidas porque a alguien se le olvidó, verles es creer que la mejor lección, NUNCA será la que uno lleve a sus clases sino la que recibe.
Correr con los ojos tapados es creer que la vida se puede vivir aún sin ver, porque el entusiasmo, la ilusión y la certeza de una compañía, te hacen ser fuerte.
No importaba el tiempo, no preocupaba el no lograrlo a la primera, porque LA PRIMERA era la actitud de las tribus eliminando esos estereotipos enfermizos atribuyendo ambos elementos a la mujer. De verdad, qué bello es sentirse torpe para explicarlo.
Cada tribu buscando su estrategia porque todo se convirtió en un aprendizaje de espacios e ilusiones.
Todo parecía terminar al recoger, entre todas las tribus, todas las cajas. Les dije que, a continuación, seguiríamos en la clase pero, cuando uno les escucha decir:
- ¡¡¡Queremos hacerlo otra vez !!!
¿Inteligencia emocional?
Se alternaban en las tribus y la emoción y expectación iba en aumento.
LLegó el momento de volver al aula:
Verles abrir cada caja y descubrir esos emoticonos, alguna tribu decía:
- ¡¡¡Joooo!!! nos han tocado todos negativos.
Y otra tribu contestarle:
- Mejor, así tenéis la oportunidad de transformar...
Porque la correspondencia entre las tribus es lo que hace que cada una de ellas sea grande, porque la CORRESPONDENCIA en la familia es de cada miembro que la forma.
¡¡¡Graaaciaaaasssss!!! una vez más por hacerme soñar con los ojos abiertos.